viernes, 2 de enero de 2009

Año nuevo

Aquí dejo algunas inquietudes del bueno de Ovidio:

"Dime, por favor, por qué comienza el Año Nuevo con los fríos, cuando más bien debería empezar en primavera? Todo florece entonces; entonces hay una fase nueva del tiempo y se hincha la yema nueva en la vid preñada; el árbol se cubre de hojas recién formadas y el tallo de la semilla asoma en la superficie del suelo; los pájaros endulzan el aire tibio con sus cantos orquestados y los rebaños juegan y retozan en los prados. Entonces los rayos del sol son suaves y sale la golondrina exótica y fija en la viga alta su nido de barro; entonces permite el campo su cultivo y se renueva con el arado. Con justicia había que llamarlo el Año nuevo".

Ovidio, Fastos I 150 ss. (trad. Bartolomé Segura Ramos, Gredos, Madrid, 1988).

4 comentarios:

Jesús dijo...

Vaya, está bien encontrar en un clásico lo que uno siempre pensó. Más de una vez, llegada la nochevieja, comenté: "Yo celebraría con mucho más entusiasmo el comienzo de la primavera que no el año nuevo en esta época estacional".
Feliz Año, de todos modos.

Franciscus Alonsus dijo...

Y deberíamos hacerlo, deberíamos hacerlo...

Anónimo dijo...

Es increíble como ve las cosas Ovidio, en una época donde no existía la luz eléctrica, y como mi profesor de latín siempre nos recordaba; tampoco había papel higienico...

Anónimo dijo...

En Stonehenge lo hacen. Allí nos veremos.